Lo dijo el Cholo en la previa: “el mejor premio que podemos tener es ver el Calderón lleno”. Y a fe que lo estuvo el pasado sábado, aunque en buena medida contribuyeran los casi 3.000 cordobesistas que estuvieron en Madrid viendo a su equipo y homenajeando también al Campeón (fantástica afición la cordobesa, dicho sea de paso), entendiendo la injusticia y el desagravio que nos hicieron los vendidos discípulos de Tébar y sus atláteres (en el fondo, da igual, el ridículo lo hacen ellos, y los “premiados”, aunque haya que cambiarlos de puesto, como les pasó con Modric, válgame señor). El mensaje, pues, quedó claro “nosotros, a lo nuestro”.
Y aunque el resultado refleje un abultado tanteador, no fue tan fácil como aparenta, porque los andaluces estuvieron bien cerraditos atrás, y a los míos les cuesta abrir la lata, aunque es admirable el ejercicio de paciencia y buen hacer que ejercen durante los encuentros. Los fundamentos los tenemos claros: buen trato al balón, desdoblamientos continuos por banda, asfixiante presión en terreno de juego visitante y ya pescaremos alguna, ya.
El juego era bueno, el dominio se antojaba total, pero nos faltaba ese último pase para terminar de enderezar la nave. Mucho monólogo rojiblanco pero pocas ocasiones finales de gol, salvo un zambombazo del espléndido Koke desde fuera del área que repelió el larguero. Pero ojito, que el Córdoba por aquel entonces andaba ahí, metido en el partido, y una fantástica contra suya acabó con un inocentón remate final a las manos de Ghilas, como no creyéndose la que podían haber montado.
Y entre estas andaba la cosa, cuando en la enésima internada de Siqueira plagada de fe y tesón (aunque marchaba con menos opciones que Gary Cooper en un concurso de tatuajes) se transformó en falta a favor de los míos. Ding-dong-ding, ¡peligro! La puso Koke, rechazó la defensa cordobesa, el balón fue a parar a Griezmann dentro del área, fantástico control y recorte en seco del francés, remate que termina rebotando en la chepa de un defensa visitante y gol que sube al tanteador. 1-0. Tan afortunado como justo.
Con ese suspiro que siempre damos los aficionados locales cuando logramos abrir la dichosa lata ante un equipo bien cerradito, nos marchamos al descanso. Parecía que la cosa estaba encarrilada. Digo parecía porque, al poco de comenzar la segunda parte, córner que lanza el Córdoba, el balón acaba en el segundo palo en la cabeza de Ghilas, gran remate de cabeza cruzando el palo hacia el otro poste y empate en el marcador, ante el delirio de la afición visitante.
Pero, con en pleno éxtasis del Córdoba, llegó la enésima internada de Juanfran, centrando hacia Griezman, cuyo remate realizando un fantástico giro de cuello hizo que al desafortunado Juan Carlos se le doblasen las manos y el balón terminase besando las redes de su portería. Ahora sí que soltábamos el suspiro definitivo, porque ahí el encuentro se terminó. O, más bien, se sentenció, porque Koke siguió haciendo de las suyas. A los 17 minutos de esta segunda parte colocó una falta lateral en la Juan Carlos salió con espíritu vendimiador, y Mandzukic cabeceó al fondo de la red. El croata, golito a golito, va sumando. 3-1 en el marcador.
La fiesta no se acabó ahí, y de nuevo … ¿No saben quién? Si, hombre, sí, el Señor Resurrección, puso otro centro de los suyos a Don Raúl todo lo que haces lo haces siempre bien García, para que cabecease cruzado el cuarto chicharrito en el marcador. Era ya el 80 de partido.
Y cuando ya todo el mundo desfilaba del estadio, llegó el 4-2 en el marcador de nuevo de Ghilas, aprovechándose de un regalito de Juanfran. Daba igual. El resultado no refleja ninguna duda sobre ninguno de los dos equipos. Al Córdoba si quiere permanecer en primera la aconsejaría un portero con carácter de urgencia. El Atleti, por su parte, a lo suyo. Sumando y transformando en el campo más inexpugnable del mundo al Vicente Calderón. Señor Tébar, qué le vamos a hacer. Otra vez ya si eso.
EL CRACK DEL ENCUENTRO: Fenomenal Griezmann, dando ese paso hacia adelante que le exigía Simeone en la previa y llevando todo el peso atacante de los míos, muy activo Siqueria cuyo duelo con Ansaldi por hacerse con el puesto de lateral titular del Atleti promete emociones fuertes, pero la estrella final fue nuestro todocampista que se llama don Koke Resurreción, sin lugar a dudas, el centrocampista más decisivo del actual campeonato liguero, a pesar de que al Señor Tébar le escueza sin piedad. Recital total del vallecano.
LA DECEPCIÓN DEL PARTIDO: Cri, cri, cantaba el grillo sin cesar …
ÁRBITRO: Clos Gómez. Sin complicaciones.
TERMOMETRO ROJIBLANCO (+ 9 GRADOS).
Le subo un gradito más, que luego todo se sabe.
Y el martes, encuentro importantísimo para empezar a aclarar nuestra clasificación para la Champions ante el Malmoe sueco allá en su casa. Ojito a los suecos, que aunque andan en plena fiesta por su reciente Campeonato Liguero conquistado, allí en su casa llevan un porrón de tiempo sin perder. Partido de arremangarse las mangas y demostrar quién es quién. No parar hasta conquistar.
4 comentarios:
Enhorabuenaaaaaaaaaa ¡¡
Hombre la verdad sea dicha , al Córdoba le tengo cariño por ser vecino y tal , y viste de verdiblanco como nosotros , pero hombre.......mi atleti es SIEMPRE MI ATLETIIIIIIIIIIIIII ¡¡ Así que amigos cordobeses el próximo partido será ¡¡ yo este finde era madrileño y colchonero ¡¡¡ jejejejej
Saludosssssssssssssssss ¡¡¡
monologo total del atleti en casa, y van ya unos cuantos en los dos ultimos años. que facil es acostumbtarse a lo bueno.
El unico pero que veo, es el oscurantismo que hay con cerci y raul jimenez, y esto es muy largo y los vamos a necesitar.
Por primera vez en no sé cuántos años tuve que escuchar el partido por la radio. Las sensaciones que transmitió el Atlético fueron: dominio infructuoso la primera media hora, pérdida de empuje el último cuarto de hora y ataque total la segunda parte. Lo cual me lleva a intuir que vamos claramente a más y que físicamente estamos recuperando la fortaleza del año pasado.
Sobre la afrenta de los premios de la Liga Florentino Pérez, lo considero un golpe tremendo en nuestra línea de flotación. A nivel de imagen salimos muy perjudicados. E imagen es publicidad; o sea, pasta. También a nivel de reconocimiento individual salen muy dañados nuestros jugadores, ya que ni ganando el Campeonato ven reconocimiento (pasta).
Un abrazo y ¡FORZA ATLETI SIEMPRE!
Griezmann metió dos, pero yo no le vi tan bien, fallando pases, pero que todos los partidos mediocres que yo le vea, que marque varias veces. Espero que cuando se lleve mejor con el resto del equipo se vayan entendiendo mejor.
Mención especial para Mario Suárez, al que siempre meto mucha caña, probablemente hiciese mejor partido que Gabi.
Es un poco preocupante que nos hagan dos goles en casa, encima siendo el Córdoba. Moyá no pudo hacer nada en ninguno de los dos, el primero viene de un dudoso córner de Siqueira, pero no es excusa, hay que mirar esto.
Mandzukic lleva mojando tres partidos seguidos, además defiende, colgó una bola buena... poco a poco creo que se va a ganar nuestro corazón por completo.
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