COPA DE UEFA. CUARTOS DE FINAL. IDA

Los resultados de los cuartos de Final, Ida, de la Copa de la UEFA fueron los siguientes:

Atleti 2 – Roma 1. Nos va a valer.

Seguro. Porque demostramos que somos mejor equipo que los romanos. A pesar de las bajas. A pesar de que ellos vinieron con todas sus figuras. Da igual. Cuando el Calderón recibe un partido europeo, ese estadio se transforma. La peña se transforma. Nuestros jugadores, también. Y el resultado son noches inolvidables para todos los atléticos, en particular, y para los amantes del buen fútbol, en general.

El partido empezó en las gradas, donde se hicieron buenas migas con los seguidores romanos, y, más concretamente, con sus míticos Ultras. Al grito de.: ¡Vieri, Vieri, va fan culo! Desde el fondo sur, respondía un eco con el mismo lema, pero cantado por los seguidores romanos. Vinieron unos 2.000. En cuanto animación, la verdad, me defraudaron. O nosotros cantábamos muy alto (lo cual es cierto) pero el caso es que yo apenas les oí. Eso sí. No crearon ningún incidente digno de mención.

El partido en sí fue dominado mientras nos duraron las fuerzas por el Atleti, y, para mí, tuvo un hecho muy significativo: el auténtico paso adelante que realizó José Mari. Ahora sí que me empiezo a creer en que este tío va a ser un crack. Condiciones tenía para ello, pero, hacía falta saber si sería capaz algún día de sustituir, en caso de que fuera necesario, el liderazgo y la responsabilidad de Kiko. Ayer demostró que sí. Él solito trajo en jaque a toda la defensa romana.

Él nos adelantó a los 13 minutos, tras un pase que dio con su “mano” el gran Michele Serena, otro que cada día que juega, mejor lo hace, de espléndido remate de cabeza. Él remató magistralmente al palo otro disparo que mereció gol al borde del descanso. Él acabó extenuado de su enorme esfuerzo. Y él se llevó una ovación del Calderón de esas que tiene compradas en exclusividad Kikogol: con toda la peña puesta en pie, aplaudiendo a rabiar.

Si a esto añadimos que el equipo en general rayó a una excelente altura: Aguilera fue una flecha (aunque no tiene ni puta idea de centrar), Roberto consiguió un golazo de los que marcan época (hay un defensa italiano que va a soñar con él el resto de su vida, que 2 recortes consecutivos en el área, qué zambombazo por toda la escuadra, que delirio, qué pasión), y, el comandante Chamot, demostró que cada día que le ves jugar al fútbol, te dices: mejor, imposible, y, cada nuevo día que le vemos, se encarga de demostrarnos lo contrario. El recital que dio este jugador el martes es para enseñarlo en las escuelas de fútbol. Tuvo velocidad. Tuvo técnica. No le pasó ni un jugador romano. Qué manera de sacar el balón controlado desde atrás.

En definita, qué recital. Chapeau, comandante, chapeau. La pena fue el golazo que consiguió Di Biagio a falta de un cuarto de hora, con colaboración de la “espléndida” barrera que puso Molina. Eso, y el desfondamiento físico del equipo (Aguiar, Baraja y Juninho no podían con su alma, con el 2-0, o bien Valerón, con sus pases, o bien Mena, con su lucha, nos hubiesen venido de puta madre, pero bueno, de cabezones está el mundo lleno).

Pero casi hasta lo prefiero. Me explico. Conozco al Atleti como si lo hubiese parido, y casi mejor que se vayan con el 2-1 que con el 2-0. Con el 2-0 salen a hacer el puto gilipollas en el Olímpico de Roma. Con el 2-1, sin embargo, tienen que salir sencillamente a tope para llevarse la eliminatoria. Y cuando mi equipo sale a tope, no hay Dios que le pare. Al tiempo.

Por último, del Olimpic – Celta no hago crónica porque, por no ver, no vi ni siquiera los goles. Lanzo el guante, a ver si alguien se anima (preferiblemente, un céltico) y nos quiere comentar un poquito del mismo.

Un saludo.
Tomi. Frente Atlético. Red Stars
TODO EL FONDO DEBE APOYAR, Y ANIMAR AL ATLETI HASTA EL FINAL.