Pues es la pregunta del millón de dólares. Yo diría que viendo la primera parte en líneas generales, y el buen estado de forma que demostraron alguno de nuestros jugadores, apostaría a que sí, que estamos preparados.
Sin embargo, viendo el agilipollamiento que nos entra en determinadas fases del encuentro, donde un equipo de Segunda División en dos minutos nos es capaz de empatar un partido en la segunda parte, cuando diez minutos antes habíamos conseguido el 0-2, pues, evidentemente, no. Una “pájara” de éstas en Champions se paga con la muerte. Ni más, ni menos.
Pero ya sabéis que soy positivo, y, francamente ayer, ví más luces que sombras sobre el terreno de juego. A saber:
- Me encantó saber de nuevo que hemos recuperado (y parece que de forma definitiva) la mejor versión de nuestro Maxi. Ayer le ví sencillamente pletórico y con sus latigazos característicos mortales en las cercanías del área. Después de su grave lesión que le hizo no rendir a su nivel la temporada pasada, probablemente sea nuestro mejor fichaje para ésta.
- También me gustó bastante Sinama. Tiene hambre de triunfo, y eso es muy importante. Si Aguirre le sabe mantener la llama viva y sentirse importante dentro de este grupo, es un jugador francamente interesante. Aparte de su gol (perfecta su ejecución en el cabezazo) nos dejó unas pinceladas técnicas de bastantes kilates, y es muy difícil quitarle el balón. Es una muy interesante apuesta este jugador, tras lo visto ayer, al menos.
- Los centrales estuvieron impecables en el primer periodo. Lo que no me gustó nada es su desmayo en el segundo (aunque fue general, no fueron ellos los únicos culpables). Eso demuestra falta de concentración y confianza, los dos pecados capitales del Atleti en la era Aguirre. Tiene que seguir insistiendo el vasco sobre este tema hasta quedarse afónico si es menester, porque es una pena que todo un buen trabajo de más de una hora se vaya a la mierda tras dos estúpidos minutos.
- Fenomenal Simao, que ayer demostró ser algo más que un simple jugador de banda, y se movió como pez en el agua entre líneas. Técnica, velocidad, visión de juego y velocidad, sus señas de identidad. Cada día me gusta más el portugués, se siente más importante y con más galones en el equipo, y los beneficiados somos todos con su exquisito trato de balón.
- Camacho, otro nombre propio con luz propia. Le ví más en los 20 minutos que jugó que el partido y medio que he visto al tal Assunsao ese, jugador que sigue sin convencerme ni lo más mínimo. El chaval aporta frescura, es un auténtico todoterreno de ida y vuelta, y encima tiene gol (fantástico su cabezazo de ayer).
- Al que vi también sorprendentemente de pena, por cierto, fue a Escándalo Forlán. Bien es cierto que el uruguayo no es de los que suele empezar muy allá, pero ayer le vi determinados lances en los que su aptitud no me terminó de convencer. Mi confianza en él es ilimitada, y voy a presuponer en su propia dosificación su partido disputado ayer.
- Al equipo le vi bien físicamente para afrontar esta eliminatoria que se nos avecina, otro detalle que puede resultar clave en el devenir de la misma.
- Por cierto, muy bien el Rayo. Estuvo muy bien colocado en el terreno de juego durante buena parte del encuentro, y su reacción en la segunda parte tras el 0-2 fue de chapeau. Para estar mucho menos rodado que nosotros, no perdieron la cara al partido en ningún instante del mismo.
Y ya está, que parece esto la final de la Champions, y tampoco es para tanto. ¿Estamos preparados? Yo me mojo: a pesar de los pesares y de nuestras lagunas transitorias mentales de ayer y de hoy que padecemos sobre el terreno de juego, apostaría a que SÍ … ESTAMOS PREPARADOS.