11 DE MARZO, NI
OLVIDO, NI PERDÓN.
"Esa sensación de Decepción, de tristeza profunda que te da igual todo. Esa". Un tuit que leí ayer a Tania Delgado, y
que expresa a la perfección el estado en que me encuentro en estos momentos …
No tengo ya ni el más mínimo
interés por esta gente. Por cierto, voy avisando, el que espere leer hoy un
alegato en el que quiera encontrar ánimos, pensando en el miércoles, y
tal, que hay que unir fuerzas, ser una piña, darlo todo en la grada, recibir al
equipo con un tifo descomunal, y 14 horas antes en la Avenida de Arcentales,
que deje ya de leer, que no pierda el tiempo tal y como hicimos todos el
pasado sábado viendo a esos individuos que dicen ser jugadores del Atleti.
Por supuesto, respeto a muerte
todo lo que cualquier buen Atlético que se precie decida realizar, solo
faltaba. Pero a mi el partido del Inter (del cual no espero absolutamente nada,
porque nada sé va a lograr, lo tengo claro también), ni aún ganándolo ni
pasando la eliminatoria, me va a quitar el sabor de boca tan repugnante con el que me dejó el
lindo paseo que se dio la muchachada por Cádiz este fin de semana.
Cualquier cosa que me salga antes
de ver un partido fuera de casa de esta gente la daré por válida, cualquiera.
¿Qué hay un concurso a esa misma hora de a ver cuánto tiempo aguanto haciendo
el gilipollas clavándome chinchetas en las pelotas? Me apunto. ¿Qué hay que
asistir a un apasionante Tour por el Reina Sofía mientras me meto entre plato y
espalda un bocata de polvorones? Allí me tendrán. ¿Qué me invitan a la primera
exposición multidisciplinar de las mujeres artistas del primer tercio del siglo
XX? Me voy ya mismo. Da igual todo. Todo me vale.
El gran palo fue en Bilbao, está claro.
Sabíamos que no iba a ser cosa fácil el tema, lo teníamos claro más o menos
todos también. Pero hombre, caer por un total de 4-0 en el global de la eliminatoria, me parece un poco fuerte,
excesivo, demasiado contundente. No ejercimos ni la más mínima oposición en San
Mamés, convirtiéndonos en un juguete roto en manos de los del Bocho.
Encima, uno tuvo que aguantar la terrible decepción que nos llevamos todos por la ilusión perdida en nuestro torneo favorito, más
la rabia contenida por los hechos acaecidos en la previa de dicho partido de vuelta, los cuales, no pienso
recordar, por respeto más que nada a los Hermanos involucrados, aunque espero
que sirvan, de una santa vez, para dejar de hacer el gilipollas con esa gente,
así de claro .Ni Club padre, ni Club hijo, ni pollas en vinagre. Ni un solo
gesto más hacia ellos. Ni un puñetero guiño. Nada. Un puto rival más, tan
asqueroso como la gran mayoría del resto, y fuera. No quiero volver a saber
nada más de esa gentuza más que eso, cuando sean nuestro mal necesario de
enfrente. Hemos dado demasiadas muestras de cariño, para solamente recibir a
cambio odio visceral. Y no sé ustedes, pero yo personalmente me he cansado.
Se salvó posteriormente el partido del Betis
en casa, tras un buen primer tiempo, pero en el cual, al final, el rival, una
vez más, casi nos terminó sacando los colores del todo, y después de una semana
entera (esto para que luego llore nuestro entrenador de si el calendario y
demás), reitero, 1 semana entera para preparar el partido del Cádiz, ves eso
que vimos el otro día. ¿Y cómo puede ser? ¿Qué clase de tomadura de pelo es esta?
Este Club lo que transmite por todos los poros de sus estamentos es un puto conformismo sencillamente insultante. Del puñetero cuarto puesto no hay Dios quien nos saque, y como de momento, aún se está ahí. ¿Qué más da? Que no se llega a una final de Copa, ¿Qué más da? Qué se está haciendo ya demasiado tiempo el ridículo fuera de casa, ¿Qué más da? Que el equipo a mediados de Marzo se va a quedar a verlas venir ya en cualquier competición que se precie, ¿Qué más da? Se está en dónde les gustan que estemos, y como el nivel de exigencia de esta afición es ínfimo (empezando por mi mismo, ojo), pues de esos polvos vienen estos lodos. Ahora para el miércoles se nos venden 3 o 4 lemas precocinados de los que tanto nos gustan a nosotros (“Latido a Latido”, “Nunca dejes de creer”, “El que no crea, que no venga”, “Un Atlético nunca se rinde”, y así me puedo tirar hasta mañana), pues ya está todo arreglado … hasta el próximo ridículo, claro. Mientras se esté cuarto, nada debe de sobresaltar en la calma del Grupo y del Club.
Para colmo de males, el Cholo
vuelve a las andadas con lo del “Hombre de Club”, y también parece que le
resbala todo al respecto. Si le traen jugadores de 45 años, perfecto, soy "hombre de Club". Si no te traen los puestos que crees indicado cubrir, correcto,
es que “Soy hombre de Club”. Si quiere forzar a Griezman en Bilbao y no le dejan, porque ser cuarto es lo único que importa, no pasa nada, a la afición le damos dos o tres nuevos lemas prefabricados y fuera. "Soy hombre de Club". Añádanle que encima, anda ahora más perdido que yo
por Valladolid buscando un estanco para comprar tabaco en un domingo
cualquiera, y así tienen el panorama que tenemos en la actualidad. Larga vida al "Hombre de Club".
¿Conclusión? Hablo por mi mismo, por
supuesto, pero es hora de, al menos en lo que a mi respecta, tomar las medidas
que crea conveniente al respecto. Iré el miércoles y los sucesivos partidos que
me toque al Metropolitano, pero que nadie espere un esfuerzo más grande que
otro que ese, mi simple presencia … Y yo diría que hasta gracias, que el cuerpo
no es ahora precisamente lo que me pide.
Y voy a ir más que nada por
respeto a mis Hermanos y a mi gente, porque lo que es mi equipo en sí, me la
trae al pairo ya lo que le pase en esta temporada. Estoy en ese estado de
decepción, de tristeza tan profunda, de vacío tan grande, que ni me importa ya
resultado alguno. Que hagan lo que quieran, puedan, sepan o les dejen. Me
importa un puto bledo.
TERMÓMETRO
ROJIBLANCO. (+ 14 GRADOS).
Estoy para pocos termómetros, la
verdad. La victoria del Betis no afecta, y considerando la complejidad que
tiene el puntuar frente al Cádiz de Munich, que, como todos bien saben,
llevaban 23 partidos ganando consecutivamente, soy benévolo y solamente
bajo 2 grados, vista la complejidad de tal visita al infierno de la Tacita de
Plata.
Nada más. El miércoles nos vemos.
Que nadie olvide su pandereta, su matasuegras y su mejor de los disfraces
posibles. Vuelve el Carnaval … “Aquí
el que no trabaja se va a la caseta. Luego me echarán a mi, pero me importa un
huevo. Tengo 2000 equipos y los medios de comunicación me dan igual. A mi no me
echan por gilipollas: este grupo está haciendo el gilipollas” …