Es una lástima que siempre, en todas las partes y en todas los diferentes contextos que se te pueden dar en la vida, cuando parece que todo más o menos lo llevas bien, controladito y hasta estás contento y todo, siempre, pero siempre, tiene que haber un puto gilipollas que se encargue de terminar poniendo un amargo sabor final a algo que te tenía que haber habido a una muy buena parte del Atleti, que salió en plan dominador total, en plan rodillo, frente a un Mallorca que no sabía qué hacer ante la avalancha colchonera, y poder disfrutar tranquilamente de una placentera victoria colchonera, sin más pretensiones. Pues no. Que no hay forma humana, oigan …
¿Qué es eso de Caminerada? Me preguntarán los más jóvenes. Pues se refiere a uno de los mejores centrocampistas que han pasado por el Atleti, que era Don José Luis Pérez Caminero (más cojones que el caballo de Espartero, Camineroooo …). Tenía una técnica exquisita, derrochaba clase por todos los lados, pese a parecía a veces un tanto zancudo en su forma de correr, era veloz, tenía gol, mucho gol (muchos extraordinarios) pero, ay, amigo, venía de dónde venía, y siempre, por unas causas o por otras (bobas tarjetitas, expulsiones absurdas, extraños dolores en zonas del cuerpo humano hasta ese momento desconocidas por la ciencia humana) en vísperas de derbi, se esfumaba su presencia cuan canuto desaparece del parque de mi barrio. Saquen ustedes sus propias conclusiones, son mayorcitos…
Volvamos al fútbol anda, (el de la primera parte, que lo de la segunda fue más bien una peli de las de Benny Hill con las revoluciones a toda leche y esa musiquita característica de fondo, vaya telita). Al poco de comenzar, Diego Costa ya pudo marcar. El Atleti circulaba el balón con una velocidad de vértigo. Vitolo seguía siendo el Vitolo del Sevilla. Joao Félix participaba en todo. Arias demostrando que se puede contar, y mucho, con él (lanzamiento al palo incluido). Koke y Saúl, apoyados por el imperial Thomas, eran los dueños del cotarro. Felipe sigue pidiendo la titularidad con megáfono en mano. Savic quiere seguir siendo el jefe del cotarro … En definitiva, un excelente Atleti, que encontró su más que justo premio tras el rechace de un córner lanzado por el propio Koke, que el vallecano le puso de nuevo un excelente servicio a Diego Costa, para que éste se comiera a todos los defensas mallorquines como si entrase en una pastelería zampando ensaimadas sin parar, y anotase el 0-1 en el marcador. Necesitaba ese gol tanto o más que nosotros le necesitamos a él, así que, a seguir en esta línea, Don Diego, que le aplaudiré hasta que se me caigan las manos, si es menester.
De la segunda parte, casi que mejor correr un estúpido velo. Parece que en vez de al campo del Mallorca, salieron al patio de un colegio y venga … todo Cristo a por el balón sin ton ni son, despropósito va, melonazo viene, tragicomedia en su más puro estado en el remate de un japo llamado Kubo, o memez análoga, que da en el palo, previo rebote de Pichichi Savic (qué peligro tiene el Señor de la Uña, Dios mío), da en la chepa de no sé quién, Oblak cazando moscas, y gracias a que el Arias andaba por allí. Eso, por no hablar de lo psicodélico de nuestro segundo tanto, en un remate de Joao Félix que da en el bulla vaya usted a saber, hace una extraña parábola, da en el palo, y entra mansamente en la red. Diría que esta segunda parte fue patrocinada por Iker Jiménez. Un paranormal y psicodélico espanto. Y Correa ejerciendo de coche de choque y entrando con un plantillón que igual hasta le cuesta la expulsión. ¡Que BIBA el BINO! Lo dicho, hemos ganado, y no quiero cabrearme. Camineeeerooooo …
EL CRACK DEL PARTIDO:
Pues me gustó el Arias (excelente profesional, que no ha piado ni para decir esta boca es mía a pesar de ser los primeros minutos que disputa con la rojiblanca en esta temporada), Felipe sigue aumentando su planta de estupendo central, bien Vitolo y Thomas, bien Koke, bien el chaval, Joao Félix, pero el crack se lo vamos a dar a Don Diego Costa, que espero que ese tanto le dé moral para los futuros que vendrán.
LA DECEPCIÓN DEL ENCUENTRO:
Morata. Lo de ayer fue un comportamiento digno de niñato consentido de Concha Espina, y ya te hemos explicado que aquí se maman los principios del Calderón. Una pena, porque te lo estabas currando mucho y bien. Ayer mandaste a tomar por culo todo. Habías recorrido un buen trecho, pero chico, a quién se le ocurre comportarse así, máxime en vísperas de un derbi. Los Atléticos somos tipos sensibles, y, para determinados temas, con la piel no fina, sino casi transparente. Así que, todos los que te estaban esperando, ahora te están atizando hasta en el DNI, pero chico, es lo que te buscaste ayer. Así que te toca pillar impulso, y empezar de cero de nuevo. E, inclusive, igual te toque aún más camino por recorrer. Gilipollas … Es que hay que ser Gilipollas …
ÁRBITRO:
Hernández al cuadrado. Estaba haciendo un arbitraje espectacular (porque el penalti que señaló era penalti, efectivamente, pero lo anuló bien porque Joao Félix se ayuda del brazo para controlar el balón en su acción previa), hasta la segunda tarjeta al retrasado del niñato. Que sí, que ya lo he explicado antes, pero, dicho esto, la expulsión en sí es una broma macabra, no me jodan … Por hablar con un contrario, sin más … Pues no se dicen cosas en un campo ni ná … Váyase usted a lamer candados, alma cándida …
TERMÓMETRO ROJIBLANCO (+ 8 GRADOS).
Partido de obligado cumplimiento, caballeros. Háganme ustedes el favor. Sean coherentes, sean dignos, y serán, probablemente, mejores personas y todo.
Y el sábado, el derbi. Partido muy esperado para todo buen Atlético que se precie, pero que yo aborrezco profundamente. Me da cantidad de pereza todo. Hasta el levantarme ese día. Pero bueno, a ustedes le chiflan, así que, espero no fallarles … Eso sí, que nunca falte … MHDP.