Importante triunfo del Atleti, más que por el triunfo en sí, por pillar carrerilla para lo que se nos avecina, oséase, 3 partidos cruciales y que marcarán muy mucho nuestra temporada: Sevilla, Ourense y Valencia.
¿El partido de ayer? Un primer tiempo aceptable nuestro, con juego agresivo, sin excesiva brillantez pero sí con velocidad, con las bandas bien abiertas, si bien sin demasiada profundidad en las mismas (Jorge sigue sin pillar el tranquillo al tema de la banda, mientras que espero que a Nano le de Ferrando los 6 partidos consecutivos que le dio a Baby Gestitos, y a ver qué pasa). Chicharrito del Niño para seguir callando a algún bocas que otro, reaparición de Ibagaza y Luccin en el centro del campo, y encuentro perfectamente controlado por nuestra parte durante todo esta primera parte, en la que Torres bien pudo ampliar su cuenta en un disparo que se le fue demasiado desviado.
¿El segundo tiempo? Deplorable por nuestra parte. Perdimos completamente en centro del campo (los cambios de Ferrando ayudaron y mucho a ello, salvo que lo pidieran los jugadores, es inexplicable quitar a Ibagaza, Jorge y Luccin, porque te pasa lo que pasó, que adiós, centro del campo, adiós, hijo mío) y nos salvó esa pedazo de muralla infranqueable que tenemos de defensa, que desbarató cualquier intento de penetración por parte racinguista, equipo que, por otro lado, justificó su puesto en la clasificación con creces, para qué nos vamos a engañar.
No supimos aprovechar la apertura de líneas de los jugadores racinguistas y fuimos incapaces de crear una contra como Dios manda, con la puta obsesión de nuestros interiores de centrar a las primeras de cambio sin apenas profundizar nada (teniendo campo para ello, añado). ¿Novo? Yo no soy de los que pito jamás a un tío que lleve la rojiblanca puesta, y menos cuando está saliendo del terreno de juego para sustituir a un compañero. Luego, si resulta que al fin Júpiter coincida con el pleisceno de Saturno y cree una alineación de estrellas tale que su efecto sobre la tierra logre que el Extraterrestre consiga un tanto a nuestro favor, nos quejaremos si nos hace algún gestito, que ya nos vale también ...
Y poco más, Nicolás, que diría aquél. Quizás el mejor fue Sosa, que, gilipolleces aparte del tal Garci apuntándose batallitas sin ton ni son (dedícate al cine y déjate de tocar las pelotas al club con soplapolleces, mamón), efectivamente va cada día a más y me está convenciendo de su juego precisamente donde hay que hacerlo ... en el terreno de juego.
Lo dicho: afrontamos fechas muy importantes que van a marcar muy mucho nuestro rumbo. Espero que los muchachos estén a la altura del club que representan. Es evidente que se puede perder, ganar o empatar en esto del fútbol, pero, siempre, mirando al frente y dando hasta la última gota de sudor por esos colores. Calidad muchos de ellos tienen, con lo que el resto debería de venir rodado.
-- Un saludo.
Tomi. Frente Atlético. Sección Baramba.
SI EL ATLETI LO ES TODO, TODO ESTÁ JUSTIFICADO.
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