Es indignante que un personaje como el tal Iturralde continue haciendo de su capa un sayo como predica ese individuo cada vez que le toca en la rifa supuestamente arbitrar un encuentro. Sinceramente, no tengo palabras para narrar lo de ayer. Qué manera de sacudir, qué manera de lesionar, y, las tarjetas, para los de rojiblanco. Ver para creer.
En el primer tiempo, solamente hubo un equipo. El Atleti. Continuó en la línea marcada por el día de los aparcacoches. Prufundidad, rapidez, ambición y perfecta concentración
defensiva. ¿Resultado? Un gol en un saque de esquina del Niño, y cero ocasiones para el Valencia. No hubo color. En la 2ª, la violencia de los pastilleros y el mejor jugador junto con Di Vaio (Vaio) del equipo valenciano hicieron que nos embotellaran en el campo y pasásemos más apuros de los previsibles. 2 tíos en camilla, con mención especial al tal David Navarro. No voy a expresar lo que siento por tal individuo porque no quiero herir la sensibilidad de nadie, pero es triste que, todo un campeón de Liga y UEFA, su único recurso posible sea emplear, en algunos casos, la violencia pura y dura en su más puro estado. Que salga del campo amonestado Gronkjaer y el tal Sissoko no fuese expulsado es un insulto a la justicia. Supongo que tendrá más recursos el Valencia que los que demostró ayer, o, dicho de otro modo, igual otro día no tiene un árbitro que le consienta lo que le consistió ayer el puto vasco ese de mierda. Pero bueno, visto como estaba el panorama, lo mejor, sin lugar a dudas, es el resultado. Eso sí, creo que voy convocado para el finde que viene. Enhorabuena, Sr. Iturralde.
-- Un saludo.
Tomi. Frente Atlético. Sección Baramba.
SI EL ATLETI LO ES TODO, TODO ESTÁ JUSTIFICADO.
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