Sé que no es culpa tuya, porque, por desgracia, en este Club me parece a mí que no explican muy bien ni lo que significa llevar esta camiseta y todo lo que conlleva. Por eso te lo voy a intentar explicar yo en esta breve carta que, si me permites, tengo a bien escribirte.
Machote, bajo ningún concepto, máxime después de haber perdido un derbi como el que se palmó el pasado domingo, y con la rivalidad tan sumamente extrema que tenemos con nuestros “adorables” vecinos, puedes irte a los dos días a celebrar el cumpleaños del tal Bobinho ese (jugador repulsivo y repelente donde los haya, fiel representante de la camiseta que defiende, qué duda cabe), salir en los periódicos tan feliz y brindando, para colmo de despropósitos, porque esa chusma consiga la décima. Diez hostias sí que te daba yo bien dadas, sí ….
Con esto no quiero decir ni que no tengas amigos del Trampa$ (yo tengo un montón de ellos, y además, algunos muy buenos), ni que no puedas irte al cumpleaños del que te salga de la polla, pero sí que te pediría que, al menos, tengas el detalle de intentar pasar lo más desapercibido posible. Porque, por si no lo sabes, a mi (y a mucha peña como yo, créeme) todavía no se me ha pasado el disgusto de que no hayáis sido capaces de ganar a los vikingos, por ese extraño acomplejamiento supino que os entra cada vez que os enfrentáis a algo vestido de blanco (ojito con el Bolton, que creo que también viste de ese color).
Tienes que respetar los sentimientos de tu gente, intentar no herirlos y saber lo que representa la camiseta que portas (bastante bien hasta el momento, no tengo queja tuya, todo sea dicho). Bastantes humillaciones ya tenemos que pasar en nuestros trabajos, en el mercado, en el barrio, vía sms, por correo electrónico o por tam-tam, para que encima vosotros no tengáis ni la más mínima dignidad ni demostréis ningún respeto ni por el Club ni, lo que es peor, por la afición que te recuerdo representas.
De todas formas, reitero, estoy convencido de que en el fondo no es del todo culpa tuya el tema. Al fin y al cabo, este club está regido por un individuo que le gusta fichar a sus desechos, que admite cedidos de dicho club o que, cuando celebra su propia comida entre directivas en su casa, pasa de ir al Asador Frontón (lugar en donde celebra el Atleti sus comidas prácticamente de toda la vida) porque al Señor Calderón (el que tiene pinta de pederasta, no confundir con Don Vicente) le impone que ahí no quiere ir. Vamos, que nos vienen con leyes hasta en nuestra propia casa. Evidentemente, así nos luce el pelo.
Hala, que ya no te molesto más. Un saludo, y a ver si elevas los balones cuando tiras los córners, querido, que a veces parece que en vez de golpear un balón de fútbol lo estás haciendo con uno de playa. Que clase y técnica tienes para hacerlo mucho mejor. Y recuerda: no muerdas nunca la mano que te da de comer. Esta entidad tiene más de cien años, han pasado por ella jugadores muy importantes y tiene una afición inconmensurable en su sentimiento.
1 comentario:
Realmente vergonzoso que ya no se le explica a los recien llegados como van las cosas aquí... en fín.
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