Pues eso. Jugamos demasiado confiados a nuestra suerte, a nuestra pegada, y al final, lo terminamos pagando. En la primera parte ni siquiera existimos. Pudo y debió irse al descanso el Valladolid por delante en el marcador. Sin embargo, cuando nos centramos, solemos hacer pupa. Da igual que Forlán esté semidesconocido. Maxi, a lo tonto, lleva ya 8 chicharros, que valen su peso en oro. Parecía sentenciado el tema, pero, Sr. Aguirre, confianzas las justas. No me quite usted al jugador más desequilibrante que tenemos, por Dios. Al menos, hasta que no sentenciemos el encuentro. ¿Por qué? Porque al final corremos riesgos innecesarios, y lo terminamos pagando. Y vaya que nos acordaremos de los 2 puntos perdidos al final. Y el Racing también se va a acordar de ellos. Y el Sevilla.
Quedaban solamente 8 partidos, y no me cuadra en absoluto que esta peña no salga a morir al campo. O que tenga esas lagunas mentales. Sí, ya sé. Los rivales también juegan. Pero ayer simplemente tuvimos enfrente a un equipo bien ordenadito, que realizó una buena presión en todo el campo, sin más. Demasiados pocos argumentos para un equipo que aspire a jugar entre la élite europea no los supere con relativa facilidad.
El resultado fue justo, sin duda. Está claro, el Valladolid se salvará. ¿Y nosotros? Pues ya veremos. Si de una puñetera vez nos tomamos las cosas en serio, supongo que nos clasificaremos al final a la Champions. Con el calendario que tenemos, si no lo conseguimos es que, sencillamente, no lo merecemos. Pero si el ni ver siquiera a 3000 tíos fuera de casa apoyándote te motiva, mal camino andamos. Y otro año sin Champions no creo que este bendito club lo pueda soportar.
No nos queda otra, miremos hacia delante. Lo más positivo, que seguimos en la posición que nos quieren vender como la mayor de la panacea del siglo XXI. Una pregunta y acabo: ¿Qué tiene que hacer Miguelito de las Cuevas para jugar? ¿A qué viene tanto empeño en ver fracasar, partido sí, partido también, a García Luis? Un atisbo para la esperanza: parece que Reyes quiere demostrarnos, al fin, el pedazo de jugador que es. Pero, por favor, que no sea siempre a costa de Simao. Como odio los putos automatismos en el fútbol.
Y otra cosa: ¿El cambio de Camacho, por qué? O yo estaba borracho perdido, o el chaval no lo estaba haciendo nada mal. Qué manera de cepillarse un partido, por Dios.
EL CRACK DEL PARTIDO: Reyes. Si sigue en la línea que demostró ayer, todavía queda un atisbo de esperanza de que vuelva a ser lo que ha sido. De él depende, pero, no lo voy a negar, nos vendría de perlas otro jugador desequilibrante más en nuestra línea de ataque. A ver si no es flor de un día.
LA DECEPCIÓN DEL PARTIDO: El equipo en sí, que no fue capaz de guardar la ropa y tenderla como Dios manda. Repito: jugando solamente 20 minutos puede que no consigamos nada.
TERMÓMETRO ROJIBLANCO: (+4). A las alturas que estamos, sumar es sumar, y un punto es un punto. Ya sé que de la manera que lo conseguimos no es la apropiada, y que teníamos los tres en la buchaca. También en la ida les ganamos en el último minuto. Un día por ti, otro por mí.
ÁRBITRO: Bien, en líneas generales.
Y una pregunta que dejo en el aire: ¿Por qué este equipo es incapaz de ganar 3 partidos seguidos? ¿Conformismo? ¿Confianza? ¿Falta de ambición? Probablemente, una mezca de las 3 cosas. En definitiva: mediocridad.
7 comentarios:
Con una primera parte así es imposible aspirar a nada.
Joder Tomi, parece que tenemos un criterio muy parecido sobre el partido de ayer. Solemos coincidir aunque con matices. Los dos pensamos que Reyes es un pedazo de futbolista que no vale un carajo como persona. Ojalá se recupere, pero estoy casi seguro de que no seguirá en el club y que ahora lo están paseando un poco para que se le vea y no perder pasta con el traspaso.
Lo de Miguelito de las Cuevas tampoco lo entiendo. Este chaval necesita minutos. Las pocas oportunidades que ha tenido ha demostrado que vale para el equipo.
Lo de Luis García, más de lo mismo. Insisto en que hay que tratar de recuperarle, que es válido, pero que como no salga pronto de la dinámica que lleva acabará siendo otro Lardín.
Lo del Kun... en fin, que hay cambios que no se entienden.
Ahora a ver si espabilan y no dejan escapar, al menos, los puntos en casa.
Cada vez somos "menos cuartos".
Un abrazo.
Santi.
Que hay león?
Yo creo que el problema es poner metas tan rácanas. Este equipo está feliz siendo el cuarto de la liga. Para ellos este era el objetivo y está cumplido. Y en cierta manera para la afición ya está bien, el problema es el de siempre... ¿y si no llegamos? Saludos y cuidate.
P.D.: Mañana me leo la entrevista.
Cada día jugamos peor y peor. No hay patrón de juego. Se juega a nada. No hay orden ni sistema ni nada. El entrenador no aporta nada. Un abrazo.
Y lo que te gustaría a tí que Reyes triunfase. Ya te estoy imaginando cual Pitagorín con el "si ya os lo decía yo", jajaja. Bueno, Tomi, 4 graditos. Yo esperaba recorte así que ni me quejo. A ver si el sábado le metemos otros dos al mercurio.
Un beso
Hele
Tenlo claro, Helen. Como Reyes triunfe, más de uno en la comunidad bloggera me va a oír. Vaya que si me va a oír ...
El partido del sábado es, para variar, absolutamente fundamental. Témome el maldito día de las penas (sí, lo he escrito bien).
Un beso.
Tomi.
No se puede jugar bien un partido y tres mal. Así nunca conseguiremos cumplir los objetivos, si es que se le puede llamar así a un cuarto puesto.
En cuanto a lo de Reyes, dudo mucho que haga suficiente como para convencerme ya que es un jugador muy irregular y que vende a su madre por cuatro duros.
Un abrazo Tomi!
Publicar un comentario