Descansaba la tripulación del gran barco guerrero indio (el archiconocido e imperial Neptuno III), cuando un alborozado grito de nuestro grumete Angelito Correa, subido en lo más alto del palo mayor, expresó con ese entusiasmo y sonrisa de tipo picarón a la par que humilde que le caracteriza, lo que el título de este diario de navegación les ha descrito. Quedan ya solo 2 etapas para terminar esta larga, dura y trepidante travesía. Inclusive, puede que logremos avanzar aún a más nudos de velocidad y este próximo domingo logremos, al fin, plegar velas y fondear en tan ansiado propósito, pero es mejor no adelantar acontecimientos, y, conociendo los métodos de trabajo de nuestro gran Almirante en Jefe Don Diego Pablo, convencido estoy de que mantendrá a los marineros rojiblancos firmes y decididos en su propósito. Un penúltimo esfuerzo. Una penúltima gota de sudor derramada. Una penúltima taquicardia, y esto se acabará. Se tiene que acabar, y lo tiene que hacer ya.
Hemos pasado de todo, en nuestro barco se ha padecido la auténtica peste masacrante y cruel del Covid 19. El gran trasatlántico blaugrana ha estado a punto de sobrepasarnos hasta en dos ocasiones casi consecutivas. Por su parte, la nave vikinga está compuesta por bulldozers rabiosos que, a pesar de que su servicio de enfermería anda dirigido por el profesor Bacterio y sus brebajes, no cejan en su empeño de terminar de abordarnos para masacrarnos sin piedad. Más atrás quedó el barquichuelo de los gitanitos del sur, sin duda, hombres pendencieros a la par que peligrosos, pero que hemos terminado por despegarnos de ellos de forma definitiva.
Por lo tanto, el Neptuno III, sigue firme, armonioso y veloz como una centella, aprovechando el viento y oleaje provocado desde el exterior por el Frente Atlético y fieles allegados. Ayer tuvimos que dejar atrás a la embarcación donostiarra. Parecía cosa sencilla el tema, porque la tripulación guerrera india, realizó una primera parte de la travesía decidida, constante, brillante, espléndida. Sencillamente espléndida, tal y como sucedió cuando logramos mantener a raya al trasatlántico Laportiano jornadas atrás. Nuestro gran cazador Suárez pronto sacó su temible arpón a pasear, en busca de alimentos para dar más vida y firmeza a la tripulación Atlética, pero no tuvo su día en su puntería final, sin bien ayudó con su experiencia y buen hacer por la borda al resto de sus compañeros. Por su parte, “Gran Lobo de Mar Carrasco” fue durante buena parte de dicha travesía una auténtica delicia verle galopar por babor. Y gracias a él empezamos a sacar las primeras yardas de ventaja sobre los guipuzcoanos.
Poco después, y tras una gran acción del Señor Suárez, hizo que nuestro grumete favorito Angelito pusiese aún más yardas de distancia. Todo parecía coser y cantar, porque, cuando parecían reaccionar los guiputxis, nuestro Gran Capitán Jan lograba plegar sus embestidas moviendo con suma maestría y reflejos sus dos grandes velas con las que mantiene firme la popa, logrando que nadie termine de abordarnos de forma definitiva. Una vez más. Otra más.
La segunda parte de la navegación comenzó igual de bien que la primera, pero con la lástima de que nuestro marinero Criminal Luisito prorrogaba su falta de tino a la hora de terminar de hundir a la flota de la Real, por más que tuvo opciones definitivas para terminar de abordarles. Y claro, entre el cansancio de la tripulación colchonera (lógico tras todo lo que se lleva navegado), el crecimiento de la donostiarra, donde su Gudari Imanol empezó a cambiar su tripulación por otra más joven y entusiasmada cantera de grumetillos, (los cuales, por qué no decirlo, demostraron por momentos desparpajo, personalidad y descaro), hicieron que intentaran también su abordaje particular, gracias al boquete que logró conseguir Zubeldía en los últimos compases del trayecto.
Todo finalizó como caracteriza siempre en nuestras etapas con nuestro Neptuno III. Lo que parecía un día plácido y soleado, terminó siendo la tormenta perfecta, cayendo un diluvio final en el que cada cual evitó la inundación rojiblanca como pudo: achicando aguas en su mayoría, otros fueron a sus camarotes a esperar expectantes el desenlace sin querer ver ni saber, pero terminó venciendo de nuevo el sol a la lluvia incesante, y de nuevo empieza a brillar y dominar con más brillantez y pureza que nunca, así que no me queda otra que gritar con todos vosotros ¡Avanti y a toda máquina, Colchoneros! ¡¡LIGA A LA VISTAAAAA!!
EL MARINERO DE LA TRAVESÍA:
Es un espectáculo ver a Savic achicar agua sin cesar, las diabluras de Yannick por babor, la imberbe agresividad de Llorente, la capacidad de cariño que llega a generar nuestro grumetillo Angelillo. Espectacular, cómo no, la tranquilidad y fiabilidad que transmite el Señor de los Mares Jan en todas y cada una de sus acciones, pero ayer el Gran Capitán Resurrección, cumplió su travesía 500 en el Neptuno III con su corazón abarcando todo, manteniendo la nave siempre firme a la par que fulgurante en su devenir final, y, sin duda, tiene que ser nuestro gran estandarte final en la consecución y conquista de nuestra isla del amor denominada Liga. Le debemos mucho. Quizás, demasiado. La realidad es que, le debemos tanto …
EL NAVEGANTE DE AGUA DULCE:
Es especialmente dañino a los ojos ver de forma paralela por la borda cómo abarca y para rayos y centellas Koke, mientras se esconde tras un barril de ron cuan chiquillo asustadizo por el temporal Joao. Que esto acabe pronto, y, sobre todo, acabe bien, y el resto de la tripulación olvide a la par que disfrute de todo lo que se nos viene encima. Será lo mejor para todos.
JUEZ SUPREMO DE LA TRAVESÍA:
Cuadra Fernández. Hoy por hoy, mi colegiado favorito, y con una amplia diferencia con el resto de bebedores sin sed.
PIRATA BARBARROJA ROJIBLANCO: (+ 12 GRADOS).
Sube la temperatura en alta mar 2 grados más, y, por lo tanto, el gran Pirata Barbarroja tiene a bien obsequiar al personal con 2 nuevas botellas de Ron. Que terminemos todos embriagados de alegría e ilusión, pues.
Y el domingo … Ay, el domingo... Viento en popa a toda vela, no corta el mar, sino vuela, nuestro Neptuno III el Temido, en todo mar conocido, y cuyo lema es sabido en uno y otro confín: NO PARAR HASTA CONQUISTAR.
1 comentario:
Buenas tardes Don Tommi, que esto acabe pronto por dios, va a acabar bien, por supuesto que debe acabar bien, nos lo merecemos, aunque los merecimientos no siempre van de la mano de los logros, pero somos mejores y lo vamos a demostrar, si seguimos en esa línea vamos a arrollar a nuestros rivales, no debemos dejarle ni medio segundo de duda, aunque luego como ayer las fuerzas escaseen y el buen hacer del contrario, la reala es un gran equipo, nos arrinconen y nos metan atrás.
Atleti en estado puro, no le de más vueltas, de una primera parte de increíble al bajón físico más que lógico, pero así somos sin más.
Por diosssssss que llegue pronto el Domingo, la ansiedad y los nervios son increíbles.
A por ellos Don Tommi.
Un saludo.
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