29 de enero de 2024

Atleti 2 - Valencia 0-. El Metropolitano recupera el aroma del Calderón.

Tiempos apasionantes estamos viviendo hoy en día los Atléticos, en forma de un calendario sencillamente infernal, abonados a los partidos a partir de las 21 h. con todo lo que ello implica posteriormente (horas de sueño que se empiezan a acumular, a la par que cansancio tanto psíquico como también físico), emociones a go-go, pero, en el fondo, todos nosotros estamos encantados con andar viviendo esta época actual, porque implica lo que todos los Atléticos queremos y exigimos a nuestro equipo: que esté siempre compitiendo por todo el mayor número de fechas posibles.

Nos espera en este mes de febrero, nada más y nada menos que, el cara o cruz ya tanto en Copa del Rey como en la CHL, y el intentar seguir agarrados a ese último vagón de la Liga que ya os comenté en anteriores jornadas. Veremos a ver lo que aguantamos y cómo lo hacemos todos, ojo: tanto equipo, como cuerpo técnico y afición. Personalmente, el pasado jueves contra el Sevilla acabé completamente extenuado: uno de los partidos que recuerdo más duros de roer, y con la sorpresita final del 96 con el penalty a favor de los Australopitecus del fútbol Mundial, con Cara-Pony con el balón ya pillado para patear y a saber, en caso de transformar la pena máxima, con qué celebración ecuestre nos sorprendería el simpático y dicharachero jugador sevillano (mejor no pensarlo, la verdad). Afottunadamente, terminé despertando de la pesadilla.

 Lo que está claro es que la gente tiene mono de Copa, y eso se nota en todo: afluencia del público al estadio, sea el horario que sea, magnífica predisposición para apoyar al equipo … A la gente se la ve de dulce, feliz y pletórica. El estar en semis nos ha dado a todos un plus añadido, y tenemos tanto amor y cariño a dicho torneo, que, convencido estoy, en esta ocasión, no moriremos en el intento.

 En cuanto al partido del Valencia en sí, la verdad es que, prácticamente durante todo el encuentro, el Atleti ejerció un dominio casi Imperial sobre la escuadra valencianista, que sí, estaba muy ordenadita y bien plantada en el campo, cierto es, pero hacía tiempo que no veía a un rival con tal inoperancia a la par que yo diría hasta inapetencia de cara siquiera a llegar a nuestra portería. Tuvimos momentos de buen juego, otros de muy buen juego, y otros tantos algo más espesos, pero, en líneas generales, el equipo rayó a un excelente nivel (máxime, reitero, con lo que vamos teniendo todos encima a nuestras espaldas).


Don Diego Pablo realizó rotaciones (se me antojan sencillamente imprescindibles, mal que no me terminen nunca de hacer demasiada gracia). Vimos a un Reinildo que le ha sentado la Copa de África como una excelente puesta a punto de su poderío físico, con la vuelta de Pableras a la titularidad del equipo (a veces algo desconcertante, pero aportando gran nivel y fluidez al juego también), y con la titularidad de Memphis, el cual va descargando peso sobre las piernas, y ha pasado de que parezcan que pesa cada una 300 kilos a ya solo 260 (y ojito, sin faltar a su cita con el gol). Y empezaron a chorrear ocasiones. Que si una de Memphis, que si un posible cabezazo desperdiciado entre Memphis y Lino  tras gran asistencia de De Paul, otra de Diosito Grizzi que sacó mi portero favorito para sustituir algún día a Oblak (partiendo de la base que no quiero que nos deje nunca), el señor Mamardashvili (última vez que pongo el nombrecito del diablo, aviso), que aún se lució en dos nuevas ocasiones más, del gran Lino y de Griezmman, respectivamente. Como ven, asedio total rojiblanco.


Allá por el 34, el Atleti seguía en plan como el séptimo de Caballería, desbocados hacia la portería valenciana, como demuestra una excelente internada de Barrios, cuyo remate con el exterior del pie volvió a sacar el impenetrable portero georgiano. El árbitro que da 5 minutos más de prolongación, y en el último suspiro, una antológico pase con esa precisión suiza que le caracteriza a Don Antoine, el mismo realizado en profundidad, aprovechando el enésimo fulgurante desmarque en velocidad de Lino, el brasileiro que se planta mano a mano con el portero, y le termina batiendo sin remisión posible. Broche de oro perfecto ante tanto dominio ejercido, y el buen hacer de nuestras huestes.

 En la segunda parte, lejos el Atleti de salir relajado para optimizar esfuerzos, fue todo lo contrario, y nos deleitó con una media hora pletórica de juego de asociación, por bandas, jugadas al primer toque, desmarques y movilidad continua, técnica y precisión, todo ello bajo la estelar dirección de orquesta de Don Koke Resurrección, que dio un auténtico recital de fútbol. Y eso que, en esta parte, al menos, ya vimos que Oblak era nuestro portero, y no se trataba de Moldovan, flamante nuevo fichaje de nuestra directiva tras la realización del esfuerzo económico  titánico de nada más y nada menos que 800 mil pavos del ala, que se dice pronto (y conste que no dudo de la valía del citado guardameta, aunque igual, para eso, mejor darle la oportunidad a Iturbe, por poner un ejemplo).

 Hasta en el minuto 54 logramos rematar un córner y todo, a través de un testarazo de Savic, en la que, nuevamente, el “A mamar” ese volvió a volar para despejar el balón. Cuatro minutos más tarde, la sentencia definitiva: Koke se inventó un mágico cambio de orientación del balón hacia la posición desmarcada de Molina, este puso un centro medido  sobre el área pequeña para que Memphis, en plancha, remachara el 2-0 que ponía patas arriba nuestro Templo. Golazo de bandera, como no puede ser de otra forma.

 Y en el 63, un Memphis desatado aún pudo conseguir el gol del siglo, en un balón en el que recibió el tulipán negro de espalda, hizo un sombrero de tacón a Mosquera, para terminar rematando a continuación al primer toque en un remate plagado de técnica, fuerza y colocación, que terminó rozando el larguero. La verdad es que el bueno del Depay es un jugador gratamente desconcertante, pero tiene una calidad técnica y hasta diría que, por momentos, plástica y todo en su juego que es digna de degustación. Con este muchacho siempre está claro que algo puede pasar (desgraciadamente, también lesión incluida, como le ha vuelto a pasar a nuestro gran Comandante Giménez, es sencillamente desolador este asunto, no hay ya remedio posible).

 Después vino un penalti que me pareció de libro en el campo de Gayá sobre Nahuel, y que el VAR terminó rectificando a Burgos Bengoechea (parece ser que no fue, y digo parece ser porque no he visto la televisión todavía, tiene pinta de ser acción calcada a la del jueves pasado de Barrios sobre Lamela), el Atleti que en el último suspiro del partido decidió que, esta vez sí, era hora de nadar y recoger la ropa, como así finalmente pasó. Y todo esto, reitero, en medio de un ambiente fenomenal, con un público entregado al equipo, con un Frente incansable como siempre en su apoyo a la muchachada, en definitiva, con ese sabor de boca y ese aroma inconfundible que había en el Calderón, y, no sé a ustedes, pero a mi no hay cosa que me haga más feliz en este mundo.

EL CRACK DEL ENCUENTRO:

Pues estoy contentísimo de la vuelta de la Roca Reinildo a los terrenos de juego, al que vi que acabó el encuentro como en sus mejores tiempos, echo un toro y tapándolo todo tanto en juego aéreo como a ras del césped. Lino sigue siendo un auténtico puñal tanto en su banda como inclusive de segundo delantero (y con gol), el centro del campo funcionó de lujo, con la aportación de Pableras y de De Paul, que sigue de dulce total, Memphis sigue aportando gol, más entonado también Molina, Diosito sigue siendo una puta delicia verle jugar, pero ayer el galardón final se lo doy a Don Koke Resurreción, nuestro Capitán, y muy especialmente, nuestro cerebro ejecutor en el centro del campo. Su mayor virtud os la he comentado ya en muchas ocasiones, pero no me importa repetíroslo, porque se dice demasiado poco: la velocidad mental que tiene a la hora de la distribución del juego, es solo para elegidos como él, y buena prueba de ello fue el pase que le dio a Nahuel Molina en el segundo tanto de ayer. Otro hubiese parado ese balón para luego, igual, dar el mismo pase también. Pero al hacerlo al primer toque como lo hizo Koke, hizo que Molina tomase la ventaja decisiva sobre su rival a la hora de centrar ese balón. Y esto, al que le parezca  fácil … Que venga a ver.


LA DECEPCIÓN DEL PARTIDO:

Que sobrasen finalmente botellines en nuestro ya mítico Cubo pre-partido. Sencillamente inadmisible.


ÁRBITRO: De Burgos Bengoechea.

Disfruté tanto con el Atleti, que ni tuve excesivo tiempo de fijarme en él, la verdad. Y eso es siempre buena señal. 

TERMÓMETRO ROJIBLANCO: (+ 16  GRADOS).

El partido en sí mismo era de obligado cumplimiento, vista la bisoñez del rival, pero la portería a cero me sigue pareciendo un elemento fundamental en la progresión del equipo, así que subo 2 nuevos grados al mismo, para dejar un ambiente agradable a la par que primaveral en nuestro nunca bien ponderado Termómetro.

 Y seguimos para bingo, que ahora viene la semanita de los derbis, empezando por el miércoles frente al Rayo. Personalmente estoy bastante agotado de tanto partido entre semana o en domingo a las 21 h., pero vista como anda tanto la grada como la muchachada del Cholo, no estoy por la labor de perderme nada, así que, una vez más gracias a la generosidad infinita del gran Rafita, volveré de nuevo a estar en el Metropolitano, así que, a seguir disfrutando de la vida en Rojiblanco, señores … “Una gitana loca tiró las cartas” … ¡PU-TA!” (aunque yo creo que pega más "¡BRU-JA!", pero bueno … Eso sí, el "¡UH AH!" ese ni en broma, por favor …).



23 de enero de 2024

Granada 0 - Atleti 1. De Copa a Copa, y gano en Granada porque me toca.

 Supercopa Arabia.

Nos tomamos la primera copa en el Despacho con el espectáculo erótico-festivo del país del cual es nuevo embajador Don Rafael Nadal Parera (el crecepelo le anda nublando las neuronas al chaval, pasta siempre llamará a más pasta). Divertido ida y vuelta sin excesivo rigor táctico, en el cual la evidente superioridad en el banquillo del rival decidió un ¿derbi? que teníamos ganado a falta de seis minutos. Gran algarabía entre mis queridos vecinos vikingos, pero bien que se lo advertí a todos después: mucho ojito, que el Metropolitano no es Arabia. Dicho quedó.

 Copa del Rey.

Y esto sí que fue un derbi de verdad (y no porque venciésemos nosotros precisamente, conste). Pero fue un partido jugado con infinita más intensidad por ambos bandos, con muchísimo más rigor táctico, mucha más pasión, con polémicas, con discusiones constantes, con un ambiente ensordecedor a favor nuestro, con una previa escalofriante por parte del Frente y sus muchachos en los alrededores, y en el que hubo un claro, justo e incontestable vencedor, que fue nuestro Atleti. Y conste, no deja de ser un partido de octavos de final, sí, pero, por otro lado, tampoco deja de ser un derbi el cual, hoy en día, probablemente sea el mejor del mundo, sin equivocarme lo más mínimo en dicha afirmación (deportivamente hablando, sin duda). Y aquí, el gran protagonista final de este pedazo de alegrón no es otro que Don Diego Pablo Simeone, que cambios o no cambios aparte, ha sido, está siendo y será, nuestro gran Pastor, nada nos falta. Porque en nuestros derbis siempre nos toca bailar con la más fea. Y aún así, seguimos disfrutando a tope. Una eliminatoria que no olvidaremos jamás.


Granada.

Con estos condicionantes nos presentamos en Granada, un partido tan importante como trampa. Importante, porque  sirve para, aunque andemos en el último vagón del todo, seguir soñando con no descolgarnos del todo en Liga, teniendo en cuenta los enfrentamientos directos que quedan, por un lado, y trampa, porque después de una gran alegría, viene en consecuencia otro estado siempre peligroso de euforia, y jugando en casa de un rival de los puestos de abajo, hacía que algo podría oler a podrido en Dinamarca por todos lados.

 Y el balón empezó a rodar. El Cholo hizo rotaciones que, en este caso, se me antojaban necesarias (dejó en el banquillo, principalmente, a De Paul, y a Koke), Barrios salió de titular, acompañando a Saúl en el centro del campo, reservó también a Giménez, saliendo en su lugar Savic, campo lleno, buena representación de nuestra gente en las gradas… Aunque el partido fuese en lunes, tenía condicionantes más que interesantes.

 La primera parte se desarrolló a un buen ritmo de juego, con el Granada arriesgando casi en plan suicida en la salida del balón (pero casi siempre sacándolo finalmente), y el Atlético, también con buena predisposición, pero ni ni el otro tenía las ideas demasiado claras a la hora de intentar transformar tanto correteo altisonante en algo concreto que llevarse a la boca (y las que hubo de Griezmann o de Don Álvaro, siempre había gente en fuera de juego, cuando no ellos mismos). Solo tuvimos para deleite del personal una genial acción técnica de Oblak, que a la hora de pasar el balón a Savic en horizontal, y completamente desmarcado, le dio tal efecto al balón que terminó marchándose a saque de esquina. No tengo palabras …


La segunda parte fue otra cosa. En realidad fue el clásico partido del Atleti con el dichoso unocerismo ese que tanto le chifla a la peña. Primera parte de desgaste, segunda, a por ellos, se consigue el gol, y los minutos finales, con el puto corazón saliéndonos por la garganta. Se cumplió ayer el guión a la perfección.

 Simeone movió la Cholectelera en el descanso, sacó a De Paul y a Lino, y se notó la presencia de ambos jugadores en el campo. De Paul dio mucho más empaque, presencia y dominio en el centro del campo del Atleti, y Lino estuvo mucho más incisivo que Roro en la primera parte. El brasileño ya tuvo una buena ocasión nada más salir, tras combinación entre Savic, Saúl y Morata previa, pero su remate fue excesivamente centrado ante las manos del especialista en Oftalmología Batalla, individuo que tiene un claro problema a la hora de ver las manos de cerca, pero, sin embargo, las que están a más de 100 m. de distancia las distingue a la perfección. Qué cosas tan curiosas tiene la vida, madre, y cuánto llorón bobo hay por ahí.

Y así llegó el minuto 54. Gol del Atleti, tras un remate inapelable de cabeza de Don Álvaro, “clink clink caja”, precedido de una no menos excelsa asistencia de Diosito Grizzi, que no centra, es que acaricia el balón. Sinceramente, se veía venir el tanto en esta segunda parte a nuestro favor.

 Apenas siete minutos más tarde, otro centro del siempre atolondrado Molina se convirtió en otra gran asistencia sobre Saúl, y el canterano, viniendo desde atrás, remató de forma también inapelable batiendo de nuevo al oftalmólogo de guardia. Una acción similar a la de Don Álvaro, en la que una se tiraron casi 5 minutos para concedernos el gol, mientras que en la segunda se decidió en apenas instantes tras consultar con el VAR o el VOR o lo que coño sea. Curioso. Altamente curioso.

 A partir de ahí, el Granada se volcó sobre nuestra meta, y el Atleti se dedicó a jugar esos minutos tan deplorables que suele hacer cuando ya llega el tramo final de casi cualquier partido y va ganando 0-1 fuera de casa. Interesante colección de despropósitos, imposible realizar una mínima posesión que dure algo más de 5 segundos, y a acularnos al borde del área y que Dios reparta suerte, o que el gran Mario Hermoso la saque de la línea de fondo cuando ya se mascaba el tanto tras remate a bocajarro de Arezo y rechace del bueno de Jan, que bastante hizo con su paradón (minuto 96), no sin que antes hubiese en el 93 una extraña acción (mano incluida dentro de nuestra área) por parte de Giménez, o que Marginal Correa hiciese lucir al guardameta local tras no aprovechar un rechace en el palo que procedía de disparo seco de Antoine. Da igual, es la historia de siempre y esta vez no me voy a mosquear en exceso, que en apenas 3 días, tenemos de nuevo el partido de nuestras vidas, así que, sigamos jugando. Lo único que importa: De Copa en Copa, y gano en Granada porque me toca.


EL CRACK DEL PARTIDO:

Tras el recital del día de Copa, sigue pletórico disfrutando de su segunda juventud Bobby Farrell (muchísimas gracias por su apunte, Don Carlos Rock and Roll) Witsel, de menos a más Pableras (se me antoja básico este muchacho en un futuro ya apenas lejano), incisivo Lino, pero esta vez el premio mayor se lo doy a Don Mario Hermoso, consumado especialista en desbaratar goles de formas, por momentos, absolutamente inverosímiles, arriesgando un montón. Añadan su valentía, jerarquía, personalidad, la limpieza a la salida de nuestro juego desde la línea defensiva, y que anda algo zumbadete, algo también imprescindible para triunfar en esta bendita casa. Os lo he dicho muchas veces, seguiré insistiendo. Voy a echar un montón su marcha en falta. Pero un montón.


LA DECEPCIÓN DEL ENCUENTRO:

Savic anda ya el hombre como anda, pero Molina, reconozco que me pone muy nervioso. Es un puñal cuando se desmarca y avanza, cierto es, pero a veces parece un mono hasta el culo de anfetas sobre el campo. Extraños giros, balones que deja botar no se sabe muy bien con qué motivo, controles desesperantes, pérdidas de ubicación en el campo especialmente preocupantes en acciones defensivas ... Desconcertante hasta decir basta.

 ÁRBITRO: Martínez Munuera.

¿Pero cuántos Munueras hay en este mundo, por Dios Santo? Ayer vimos al que estuvo sobre el campo, y a otro clavado que era linier, ¿No? Que jaleo, la leche, la Toñi. Menos mal que suelen ser todos igual de inútiles, por otro lado. Así uno no tiene la sensación de ser injusto cuando se le insulta en tiempo y forma, pensando en sí me habré equivocado de Munuera o no.

Al grano:

Referente al tema de los  goles de Saúl y Don Álvaro, y partiendo de la base de que no me entero absolutamente de nada con el rollo ese de las líneas azulitas y rojitas con que se entretienen despistando al personal, para mi son dos acciones en línea con el defensor, y, por lo tanto, tantos legales, porque el espíritu de esa regla, por un lado, es favorecer al espectáculo, y en caso de duda, se concede gol, y, por otro, el objetivo del VAR no debería de ser más que entrar en jugadas flagrantes, no rearbitrar un partido en sí (claro que, después del Robobo de la jojoya que le hicieron el otro día al pobre Almería, a ver cómo cojones defiendo ahora yo este razonamiento). Así que simplificando, que es  gerundio.

Y con el tema de las manos, yo diría que ambas son involuntarias, aunque, en el caso de Giménez, quiero pensar más bien que es así. Y aquí lo voy a dejar estar, porque, al revés del tema de los goles de jugadores en línea, en caso de duda, no se debe de pitar penalti. Y no hay más. Todas las demás conjeturas, reglas, imágenes ralentizadas, en blanco y negro, en color, en Cinemascope, a cámara lenta, superlenta , 4K, 5K, Cine Exin y demás pijadas, las dejo para el resto del Universo. Se nota, ¿No? Efectivamente. Ando muy saturado con todo esto también.

 

TERMÓMETRO ROJIBLANCO: (14 GRADOS).

Partíamos de 11 grados tras la derrota en Girona, subimos 2 grados más por victoria con portería a cero, y otro gradito más por la victoria en Los Cármenes, que al fin y al cabo, veníamos de la batalla del jueves, y en tres días, tenemos otra dura pero de verdad. Así que el Termómetro sigue en su búsqueda definitiva de recuperar sensaciones. Vamosssss …



Cuando más se le veje, insulte, desacredite, infravalore y se le falte al respeto a Don Álvaro, éste sigue respondiendo con hechos, no palabras. 23 de Enero, y ya solo anda a dos chicharros del objetivo final que le marqué. Y es que, mientras unos vociferan como verduleras en busca de los 5 céntimos perdidos, otros beberemos y zamparemos a la costa de semejantes especímenes. Don Álvaro, ande tranquilo. El nombre de la Familia permanece intacto.

Y este jueves, como ya he dicho por ahí, el partido de nuestras vidas. Vienen 2000 palanganas para acá, y les recuerdo que el año pasado se llevaron la E.L. mientras luchaban por el descenso, así que cuidadín, cuidadín. Nosotros hemos hecho lo más difícil, eliminar al rival más complicado (tanto por su poderío deportivo tanto como por todo el escatológico entorno que arrastra esa gente, pregunten por Almería si dudan, pregunten), así que, cero confianzas, que, como bien me ha dicho Don Pablo esta mañana, estamos a 3 partidos de llegar a una final, y dos los jugamos en casa. No podemos fallar, y no vamos a hacerlo, de hecho “ … “Yo vengo a verte, será porque te amo”



4 de enero de 2024

Girona 4 - Atleti 3. Crueldad Intolerable.

Tres de la mañana ya, y sigo dando vuelta tras vuelta en la cama sin lograr dormirme de una santa vez. Mi cerebro es abordado por un montón de preguntas, a las que no encuentro respuesta alguna. ¿Cómo se nos puede escapar un partido como el de ayer? (vuelta para un lado). ¿Por qué salimos siempre tan desenchufados del mundo al comienzo de nuestros encuentros fuera de casa? (vuelta para otro). ¿Qué diablos le pasa a Koke, puede que le esté influyendo el tema de la renovación? (tengo calor, me destapo un poco). ¿Por qué el Cholo se lio a hacer cambios sin ton ni son, cuando el Atleti tenía el partido más que controlado y se mascaba el gol de la posible victoria? (Ahora tengo frío, joder). ¿Hay banquillo realmente? ¿Qué pasa con Angelito, que suma últimamente tan poco? (tengo sed, dónde anda la puta botella del agua). ¿Volverá a caminar algún día con soltura Memphis, o seguirá pareciendo que cada pierna le pesa unos 200 kilos? (voy a por otra pastilla para dormir, no puedo más). ¿Cómo puede ser el mundo tan sumamente injusto y cruel, como lo ha sido hoy con el Atleti? (me desespero, no aguanto más).

 

En la primera parte especialmente, el Girona demostró fehacientemente por qué andan donde andan, y salieron auténticamente endemoniados a por nosotros. Ni 30 segundos habían transcurrido, y ya Dovbik pudo marcar tras asistencia de Savinho, que en este primer tiempo nadie fue capaz de sujetarlo como Dios manda.

La siguiente embestida local, gol, cómo no, y para no perder la costumbre. Valery controla un balón al borde del área, va acomodando el mismo a su mejor posición para disparar con solo el seguimiento de Witsel, y chuta colocado batiendo a Oblak a placer. No puede ser que un menda remate así y no tenga a 5 tíos rodeándole alrededor, lo menos. De verdad que no. Antes sí que lo hacíamos.

 

Pero reaccionó bien la muchachada, no se dejó llevar esta vez y empezó a controlar la situación poco a poco. Y en seguida, Don Álvaro empezó su  recital ya habitual y anotó el primer tanto en una asistencia de Griezmann tras un balón peinado de cabeza (partidito que hizo el francés, madre, por cierto, el peor que le recuerdo casi yo diría desde que está en el Atleti), que Morata se internó en el área y cruzó ante la salida de Gazzaniga. Primer empate en el marcador.

 

Poco nos duró la semi-alegría, sin embargo. A la media hora, Diosito da un pase algo comprometido hacia a Koke, este se duerme pensando posiblemente en la puta renovación, le roban la cartera, Iván Martín remató a bocajarro, Oblak atajó como pudo, pero el rechace le cayó a Savinho que remachó a placer. 2-1, vuelta a empezar.

 

En el 32, sin embargo, vino la jugada polémica de la noche, en un regalito del Girona, que de nuevo Griezmann tardó un mundo en disparar cuando lo tenía todo a huevo para conseguir el nuevo empate, y su disparo tardío final remachó en la mano de Eric García antes de atajar cómodamente el portero. ¿Penalti? Ni hablar del peluquín, que no hay que perder las buenas costumbres.

 

Seis minutos más tarde, vino el 3-1, en una extraña falta (dicen que ensayada, yo no vi dicho trabajo táctico por ningún sitio, la verdad, fue un tanto bastante afortunado por parte de los locales), en un centro que Dvbyk no logra controlar bien, y el rebote se le queda muerto en el segundo palo a Blind, que remacha, de nuevo, a placer. “A placer”. Así se debería de llamar nuestra nueva forma de defender fuera de casa que tenemos este año. Sírvanse al  gusto. No se nos corte nadie.

Y cuando esto tenía muy mala pinta pero de verdad, una gran asistencia del fabuloso De Paul hizo que Don Álvaro se lo guisase y se lo comiese en acción individual poniendo el 3-2 en el tanteador. El Atleti se creció, el Girona no podía con nosotros, Morata que consigue el empate, pero lo anulan porque tenía adelantado un cordón de una bota sobre el último defensor local, y aún eso y todo, ya en el 48, marró el propio Don Álvaro un gol más que hecho tras remate anterior de De Paul. Qué extraño es este chico en algunas cosas, porque el tanto que yerra era mucho más sencillo que los dos que consiguió anteriormente. Las cosas de Morata. Con este resultado nos fuimos al descanso.

 

La segunda parte fue tan buena como frustrante por parte de nuestro Atleti. Dominó, embotelló al rival, sacó medio millón de córners (a cual más intrascendente, por cierto, qué desesperación), tuvo infinidad de ocasiones de gol, aún más situaciones de gol claras para haber aprovechado un buen puñado de ellas, pero, las más de las veces, nuestros delanteros a la hora de rematar se disfrazaron de Reyes Magos, y lo hicieron portando regalitos a las manos del desbordado Gazzaninga. El primer Rey Mago fue Diosito, luego Riquelme, venga dominar y dominar, hasta que, en el 53, llegó el empate, de nuevo de Don Álvaro, tras una sublime acción individual de De Paul. Obviamente, el equipo mejoró con el cambio que hizo el Cholo en el descanso poniendo a Molina de lateral derecho (al fin, un lateral en su posición), quitando al ayer también desesperante Lino del campo, adelantando a Llorente en la banda (el chaval pone voluntad, pero conduce el balón como si estuviese llevando un puto tractor en un sembrado, que falta de fluidez, de control y de clase tiene el puto Lechugo este, por Dios), y poniendo a Roro en la izquierda, en dónde fue una auténtica pesadilla de cara al marco rival. Lo más difícil estaba hecho, y no se nos podía escapar este partido bajo ninguna circunstancia, pero claro, hablamos del Atleti, no de cualquier otro equipo en el mundo, y aquí jamás puede uno decir de esta birra no beberé, y este partido lo voy a ganar.

 

Una ocasión clara tuvo el Girona antes del gol final (si es que a esa última acción se la puede considerar una ocasión clara, que esa es otra), en un remate durísimo de Dovyk que sacó su habitual y poderosa mano sideral Jan para despejar (minuto 61 de juego).

 

Todo lo demás, y dominar, y dominar, y volver a dominar, pero nada. Que no hay manera. A falta de un cuarto de hora, Riquelme, que estaba en su salsa (y no me vengan con cuentos de cansamientos, por Dios Santo, que son profesionales, coña) le quita el Cholo por sacar al "en su mundo Correa". Malo. En el 84, de nuevo Don Diego Pablo quita al brutal De Paul (estaba disfrutando como un gorrino en un lodazal, y manejando el partido a su puñetero antojo, al igual que hizo el día del Sevilla cuando nos quedamos con 10), y saca al cadáver del Memphis. Peor. Se acabó el Atleti. Luego ya se acojonó del todo en el 88, quiso conservar el empate sacando a Saúl y Azpilicueta y quitando a Morata (cambio también estúpidamente hecho, por cierto) y al patético ayer Diosito Grizzi (cambio estúpidamente no realizado mucho antes), el Atleti terminó ya de esfumarse del todo, y en el descuento, un punterazo más que afortunado de un tal Iván Martín, le sale el balón caprichosamente a la escuadra, y, por favor, necesito quitarme cuanto antes de la cabeza el “movimiento” (por decirlo de una manera suave, y desde el más que profundo cariño que le tengo) que hizo Koke para defender dicha acción. Es superior a mis fuerzas, lo siento. No lo puedo entender. Así que sí, 4-3 final, y broche de oro a esta película tan espantosa como fue ayer "Crueldad Intolerable".

 

EL CRACK DEL PARTIDO:

Nuestra representación ayer en grada, ese grupito de selectos entusiastas que había en el córner. Fue sencillamente ejemplar cómo animaron y con qué entusiasmo durante el desarrollo del mismo, a pesar de los bandazos que fue dando el equipo. Y la mayoría eran críos, ojo. Sinceramente, me emocioné un montón con ellos.


LA DECEPCIÓN DEL ENCUENTRO:

No voy a entrar en sesudos análisis físico-tácticos, porque, básicamente, no tengo ni puta idea. Dicho lo cual, defendiendo así, de verdad, es imposible ganar absolutamente nada. Pero imposible del todo. Eso sí que lo sé. Otra cosita que sé también: ¿Witsel es defensa? NO. ¿Llorente es lateral? NO. ¿Lino es lateral? NO. ¿Riquelme es lateral? NI EN BROMA, VAMOS. ¿Hermoso es lateral? NO. Y hablando de más cosas. ¿Koke es un 5? NO. ¿Witsel lo es? Sí, pero le empleamos de central. ¿Cuál es la única posición que el Cholo pidió reforzar en verano? UN CINCO. ¿Se le ha reforzado? "EL CINCO ES BARRIOS". ¿Se le va a reforzar ahora? "EL CINCO ES BARRIOS". ¿Por qué no se le hace ni puto caso en la única posición que pide nuestro Míster reforzar? "EL CINCO ES BARRIOS". No hay más preguntas, Señoría.


ÁRBITRO: González al Cuadrado.

Salvo la acción del penalti que no les sale del nardo avisarle la puta chusma del VAR para que ni siquiera viese la mano, impecable arbitraje el suyo.


TERMÓMETRO ROJIBLANCO (11 GRADOS).

 

Partíamos de 15 grados, la victoria con portería a cero del día del Sevilla provocan subida de 2 grados más, nos ponemos en 17. Pero, tras lo de ayer, bajada de 3 grados por perder un partido que debimos de haber ganado sí o también, nos ponemos en 14, y otros 3 grados menos porque es sencillamente inconcebible encajar 4 goles. Patético a más no poder. ¿Conclusión? Nos quedamos finalmente en 11 grados … Y gracias.


A cuatro ya del objetivo marcado. Pero estén tranquilos, que aún habrá gente por ahí que le siguen negando la piel y la sal. Eso sí, anden tranquilos todos, que los delincuentes del palco le sacarán buena tajada este mismo verano a su traspaso … si es que no lo hacen antes. Es lo que tiene estar construyendo cada 5 minutos una nueva ciudad deportiva del orto, aunque a los aficionados nos importe tres pepinos que tengan playa, pistas de pádel, podamos hacer surf, puenting, o polling in vinagrin.


Y el sábado, toca levantarse como sea. Si la Copa del Rey siempre es sagrada para cualquier buen Atlético que se precie, tal y como se nos anda poniendo el percal en Liga, es ya tanto Sagrada … como prioritaria. Déjense el alma, por favor. Hasta la última gota de sangre y sudor en el campo.





LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

MAREANDO LA PERDIZ: "Desesperado"

Atético de Madrid - Webring
Peña Atletica Centuria Germana Vorherige Seite
Previous Page
Página Anterior Seiten Übersicht
Page Overview
Descripción De La Página Zufällige Seite
Random Page
Página Al Azar Nächste Seite
Next Page
Página Siguiente
FD12853D-b4b758962f17808746e9bb832a6fa4b8