River-Boca. NO ME PUEDO MORIR SIN VERLO EN DIRECTO.

Ayer, por primera vez en mi vida, pude presenciar "en directo" un River-Boca. Y, la verdad, acabé sencillamente emocionado. ¡Qué ambiente! Es, sin lugar a dudas, el mayor espectáculo del mundo. No sé ni cómo ni de dónde sacaré la plata para ir para allá, pero no me puedo morir sin presenciar eso en directo.

El campo estaba lleno de sentimientos. Lleno de hinchas de uno y otro equipo con el corazón puesto en sus manos mientras realizan cánticos sencillamente majestuosos. Eso es vivir el fútbol y lo demás son tonterías. De verdad, repito, acabé sencillamente emocionado, y eso que no estaba en el Monumental.

Si a eso le añaden que uno es más bostero que gallina (bastante más) pues, encima, miel sobre hojuelas. Porque Boca le dio un SOBERANO baño a River durante todo el encuentro. Es más, en la primera parte, hubo momentos hasta en que los bailaron. Me encantó Boca. Me encantó su ambición. Salieron a demostrar que van a por el campeonato, y vaya si lo hicieron. Hubo varios jugadores que me gustaron especialmente: en defensa, Perea y Clemente Rodríguez. Bataglia (del que se dice que está hecho por el Vila-Real) en el centro del campo (además de cabecear perfectamente en el primer tanto bostero) y un brasileiro llamado Iarley en la delantera, que metió un fenomenal segundo tanto y que fue una pesadilla constante para la defensa de River.

De verdad, de River, nada de nada. El portero, quizás, Constanzo, sí que es muy bueno. Y la hinchada, que demostró bastante más amor propio que sus propios jugadores.

Pero, ya digo, independientemente del resultado, uno que está completamente loco por este rollo de fútbol, siente una terrible envidia por los ambientes argentinos. Es otra cosa, francamente. Otra maravillosa cosa.

-- Un saludo.

Tomi. Frente Atlético. Vieja guardia. LCJ2.
ETERNAMENTE PRESENTES,

FIELMENTE ULTRAS.
NIUSERO DEL AÑO 2003-2004.