Importantísima victoria la conseguida ayer en Getafe para aguantar el ritmo que se está llevando en el presente Campeonato Liguero, la cual se basó en un muy buen primer tiempo, dominado de cabo a rabo por los míos, y en una no tan buena segunda parte, en las que mi equipo se atolondró con las broncas que hubo y al final casi nos cuesta los dos puntos el tema, curiosamente a raíz que de que el Getafe se quedó con 10 jugadores. Hay que joderse, hostia.
Como ya he comentado, el Atleti dominó por completo en el primer tiempo, en el cual Moyá bien se podía haber puesto a comer pipas con los del Frente viendo nuestra superioridad, la cual no se transformó en ocasiones demasiado claras, la verdad, aunque, eso sí, forzamos un buen puñado de córners. Por cierto, que con esto de que metemos muchos goles a balón parado, a los del Getafe ayer solo les faltó subirse a caballo encima de nuestros jugadores para defender dichas acciones. Y como encima el atontolinao del árbitro no se enteraba de nada, pues eso … que cada acción de esas fue una puta batalla constante de “espera que te agarro, me subo, déjame en paz que te caneo, ya verás …”,
Dominó dicho periodo con muy buenos fundamentos futbolísticos: balón a ras del suelo, perfecto posicionamiento en el terreno de juego, atacando por las bandas (pedazo de lujazo se marcó Siqueria en una de esas internadas, en un precioso regate). Y las ocasiones empezaron a llegar. A los 6 minutos Mario Suárez disparó fuera en una preciosa jugada combinada del Atleti. A la media hora, Raúl García remata desde dentro del área tras una buena internada de Siqueira con posterior dejada de Griezman hacia el navarrico. El dominio empezaba a ser aplastante, y el Getafe empezó a rascar más de la cuenta. No que fuesen goles cantados, ni mucho menos, pero el rodillo rojiblanco marcaba el pulso a la perfección.
A los 38 casi marca Raúl García, y un minuto después, tras la enésima batalla dentro del área en el que todo el mundo andaba más agarrado que en un concurso de chotis, Mandukic se aprovecha de su olfato de gol para anotar el 0-1 en un rechace de Guatia que, a la postre, fue definitivo en el marcador. Con este justo más que resultado se llegó al descanso.
Tras el mismo, una noticia me impactó por completo, como fue la inesperada muerte de Pepe García Carpintero (me caía de cine, a pesar de que me he enterado que era vikingo en su intimidad, da igual, DEP , amigo) y, la verdad, en la segunda parte estuvo mi cabeza más allá que acá, aunque tampoco es que lo que estaba viendo me forzase demasiado a no hacerlo. El Getafe intentó el empate, con 3 paradas consecutivas de Moyá dentro del área, después, a los 12 minutos, llegó la justa expulsión de Alexis por agresión sobre Mario Mandzukic (y hasta Juan Rodríguez pudo ser expulsado en un pisotón sobre el propio Mario cuando le estaban atendiendo en el césped, encima pone como excusa que “solo le pisó un poquito”, vaya cerebro se ha perdido la Universidad de Harvard), y cuando todo pintaba para que el Atleti cerrase de una vez el partido, pues la cosa no fue así, el Getafe, con más corazón que cabeza, nos inquietó más que lo que debiera, nosotros apenas creamos una solitaria buena acción del propio Mandzukic en una jugada en la que se plantaba solo ante Guaita, demostrando que su fuerte no es irse en velocidad en acciones largas, y al final terminamos perdiendo tiempo en una esquina, sin saber muy bien el cómo y el por qué. Yo no sé a ustedes, pero a mi cada vez que se ponen a dejar correr el cronómetro de esa forma tan ruin y tan mezquina, se me llevan los siete males, la verdad. Los icineraba a todos.
En fin. Seamos positivos. Lo importante es lo importante. Seguir compitiendo. No será fácil que demos nuestro brazo a torcer, ya verán.
El CRACK DEL PARTIDO: Pues yo se lo voy a dar a Manduzkic. No es un jugaddor excesivamente virtuoso técnicamente hablando, pero en los partidos en los cuales hay que remangarse y partirse la cara ahí está, en primera línea de fuego. Si encima, por el camino, va consiguiendo golitos, miel sobre hojuelas. Grande Mario.
LA DECEPCIÓN DEL ENCUENTRO: Sin ser para tirarse de los pelos ni mucho menos, pero partidillo pelín tirando a grisáceo de Griezmann, Raúl García y Arda.
ÁRBITRO: Un tal Melero López. ¿Pero de dónde pollas ha salido este tío, mi madre? ¡Que puto pasote de menda! Es que no se enteró absolutamente de nada, vamos. Está el colega para que le lleven al museo de cera directamente. Hará historia, ya lo veréis.
TERMÓMETRO ROJIBLANCO: ( + 8 GRADOS).
Le subo un puntillo que les debía del día del Espanyol, y otro por la victoria de ayer, va. Gradejo a gradejo …
Y el sábado que viene, nos visita el Córdoba, encuentro que ya todo el mundo da por hecho, pero que vendrán con la ilusión que les transmita su nuevo entrenador Djukic. Así que ojo avizor. Si el puto gripazo que ando pillando no me lo impide, no me lo pienso perder, ¿Y ustedes?